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T 39 CC 01

Las fuentes del ordenamiento jurídico español son:

La ley, la tradición y los principios fundamentales del derecho.

La ley, la costumbre y los principios generales del derecho.

La ley, la costumbre y los principios fundamentales del derecho.

La ley, las normas autonómicas, la costumbre escrita y los principios generales del derecho.

Las fuentes del ordenamiento jurídico español se encuentran reguladas en:

El título preliminar del Código Civil, redactado por Decreto 1836/1974, de 31 de mayo, por el que se sanciona con fuerza de Ley el Texto Articulado del Título Preliminar del Código Civil.

El título preliminar de la Ley de Enjuiciamiento Civil.

El título primero del Código Civil, aprobado por Real Decreto de 24 de julio de 1889 por el que se publica el Código Civil.

El artículo 9 de la Constitución Española.

Carecerán de validez las disposiciones que:

Contradigan en esencia otra de igual o superior rango.

Contradigan otra de igual rango.

Contradigan otra de rango superior.

No hayan sido sancionadas por el Rey.

La costumbre regirá:

Siempre que no sea contraria al orden público.

En defecto de ley aplicable, cuando no sea contraria al orden público y resulte probada.

En defecto de ley aplicable, cuando no sea contraria a la moral y los usos jurídicos.

Sólo en defecto de ley aplicable, siempre que no sea contraria a la moral o al orden público y que resulte probada.

Los usos jurídicos que no sean meramente interpretativos de una declaración de voluntad tendrán la consideración de:

Principios generales del derecho.

Costumbre.

Fuentes del ordenamiento jurídico.

Usos jurídicos aplicables.

Los principios generales del derecho se aplicarán:

En defecto de ley o costumbre.

En defecto de ley, costumbre o los usos jurídicos, sin perjuicio de su carácter informador del ordenamiento jurídico.

En defecto de ley o los usos jurídicos, sin perjuicio de su carácter informador del ordenamiento jurídico.

En defecto de ley o costumbre, sin perjuicio de su carácter informador del ordenamiento jurídico.

Las normas jurídicas contenidas en los tratados internacionales no serán de aplicación directa en España:

En tanto no sean ratificadas por el Rey y publicadas en el Boletín Oficial del Estado.

En tanto no hayan pasado a formar parte del ordenamiento interno mediante su publicación íntegra en el Boletín Oficial del Estado.

En tanto no hayan pasado a formar parte del ordenamiento interno mediante su publicación en los Boletines Oficiales de la Unión, del Estado Español y de las Comunidades Autónomas.

La jurisprudencia complementará el ordenamiento jurídico:

Con la doctrina que, de modo reiterado establezca el Tribunal de la Unión Europea y el Tribunal Supremo del Reino de España.

Con la doctrina que, de modo reiterado, establezca el Tribunal Supremo al interpretar y aplicar la ley.

Con la doctrina que, de modo reiterado, establezca el Tribunal Supremo al interpretar y aplicar la ley, la costumbre y los principios generales del derecho.

Con la doctrina que, de modo reiterado, establezca el Tribunal Supremo y Tribunales Superiores de Justicia que en segunda instancia interpreten y apliquen la ley.

Los Jueces y Tribunales tienen el deber inexcusable de resolver en todo caso los asuntos de que conozcan, ateniéndose:

Al sistema de fuentes establecido y a las sentencias del Tribunal Constitucional.

Al sistema legalmente establecido.

Al sistema de fuentes establecido.

Al sistema de fuentes legalmente publicado.

Según el artículo 2 del Código Civil, las leyes entrarán en vigor:

A los veinte días de su publicación en el «Boletín Oficial del Estado», si en ellas no se dispone otra cosa.

A los veinte días de su completa publicación en el «Boletín Oficial del Estado», si en ellas no se dispone otra cosa.

A los veinte días de su completa publicación en el «Boletín Oficial del Estado», si en ellas no se dispone otra cosa, siempre que la vacatio legis no sea superior a noventa días.

A los veinte días hábiles de su publicación en el Boletín Oficial correspondiente, si en ellas no se dispone otra cosa Siempre que no sea contraria al orden público.

De acuerdo con el Código Civil, si nada se dice sobre el cómputo de los plazos, los días se entenderán:

Hábiles.

Naturales.

El Código civil guarda silencio al respecto y se remite a la Ley de Enjuiciamiento Civil.

El Código civil nada dice al respecto.

Las leyes sólo se derogan por:

Otras posteriores.

Otras posteriores, recobrando vigencia las que ésta hubiere derogado.

Otras posteriores que así expresamente lo indiquen.

Otras posteriores o el desuso de las mismas.

La derogación tendrá el alcance:

Nada de lo anterior es correcto.

Que expresamente se disponga y se extenderá siempre a todo aquello que en la ley nueva, sobre la misma materia, sea incompatible con la anterior, recobrando inmediatamente vigencia las que ésta hubiera derogado.

Que expresamente se disponga y se extenderá a todo aquello que en la ley nueva sea incompatible por su carácter especial.

Que expresamente se disponga y se extenderá siempre a todo aquello que en la ley nueva, sobre la misma materia, sea incompatible con la anterior.

Las leyes tendrán efecto retroactivo

Salvo que sean de carácter sancionador.

Si no se dispusieren lo contrario.

Salvo que regulen los derechos recogidos en el Título Primero de la Constitución Española.

Ninguna es correcta.

Las normas se interpretarán:

Según establezcan otras posteriores que así expresamente lo indiquen.

Según el sentido propio de sus palabras, en relación con el contexto, los antecedentes históricos y legislativos y la realidad social del tiempo en que han de ser aplicadas, atendiendo fundamentalmente al espíritu y finalidad de aquellas.

Según el sentido propio de sus palabras, en relación con el contexto, los antecedentes históricos y legislativos, atendiendo fundamentalmente al espíritu y finalidad de aquellas.

Según el sentido propio de sus palabras, en relación con el contexto y la realidad social del tiempo en que han de ser aplicadas, atendiendo fundamentalmente al espíritu y finalidad de aquellas.

¿Cuándo procederá la aplicación analógica de las normas?

Cuando éstas no contemplen un supuesto específico, pero regulen otro semejante entre los que se aprecie identidad de razón.

Cuando expresamente lo dispongan.

En ningún caso.

Nada de lo anterior es correcto.

En el cómputo civil de los plazos:

No se incluyen los días inhábiles.

No se excluyen los días inhábiles.

Se excluyen los días naturales.

Se excluyen los días hábiles.